El comunicado emitido ayer por La Liga no es más que la confirmación de lo que muchos sospechaban; es un desenlace que muchos anunciaron ya de unas cuentas, en las que hay muchos puntos grises, algunos muy oscuros y de difícil defensa, y que colisionan frontalmente con la normativa contable y de auditoría.. El FC Barcelona consiguió, a través de una medida cautelar, que el CSD paralizara la no inscripción de los jugadores Dani Olmo y Pau Víctor, pero no es el CSD el que tiene que resolver esta cuestión, sino el Tribunal Administrativo del Deporte, TAD, que es quien tendrá que resolver si efectivamente la inscripción de estos jugadores se debió acometer o no.. Por todos es conocido que estos jugadores fueron inscritos a consecuencia de una operación o un negocio jurídico planteado por el Fútbol Club Barcelona, como era la venta de los palcos VIP, valorados en torno a 100 millones de euros. Esta operación, según el comunicado de la Liga, no se hizo ni en tiempo ni en forma, por lo que no se pueden computar esos ingresos, y por lo tanto, de facto se interpretaría como una reducción del límite salarial del Fútbol Club Barcelona, lo que confirmaría la resolución emitida en su momento por La Liga de no inscripción de estos dos jugadores. Una resolución que la Federación Española de Fútbol también compartía. Llama la atención que en el transcurso de estos últimos tres meses el FC Barcelona ha tenido tres auditores. Sin duda, parece que estas cuentas pueden representar un peligro para aquellos asesores o auditores que estén encaminados a certificar sin salvedades la imagen fiel que el club propone.. La Liga, en los controles presupuestarios que tiene establecidos y donde viene solicitando información de los estados contables financieros intermedios, ha confirmado sus sospechas sobre la operación de la venta de palcos VIP.. De hecho, La Liga ha anunciado que formalizará una denuncia a través del ICAC contra el auditor que certificó la contabilización de la venta de estos palcos VIP en la cuenta de pérdidas y ganancias, cuando precisamente en esta revisión que se está haciendo, parece no haber rastro de ella. La Liga ha resaltado que esa contabilización no se ha efectuado conforme a lo que indicó el club y a lo que certificó este auditor, un hecho que reduce el margen de maniobra en la capacidad de fichar del club culé.. Este hecho (no casual) viene casi a coincidir con la resolución que en pocos días se estima que va a emitir el CSD a consecuencia de la cautelar que planteó el Barça, y que está permitiendo que ambos jugadores jueguen competiciones oficiales.. Estas medidas adoptadas por La Liga hacen todavía más complicado el escenario, y sin duda, pase lo que pase ante el CSD y posteriormente ante el TAD, parece que finalmente pueden ser los tribunales ordinarios los encargados de resolver esta complicada situación.. Lo que no puede negar la Liga es que sus resoluciones pierden toda eficacia cuando los clubs agotan los recursos en fase administrativa, y ya no digamos cuando ejercen acciones judiciales, dejando a estas como papel mojado.. Finalmente, el Barcelona es posible que consiga sus objetivos por lo menos a corto plazo; de hecho, sus jugadores siguen jugando.. Un escenario sin duda complejo, y donde La Liga parapeta toda la información recabada en la revisión de los estados contables intermedios al CSD, precisamente para que falle a su favor, incluso solicitándole en varias ocasiones que se nombrara y designara a un perito para que revisara en concreto esta operación de la venta de los palcos VIP, algo que de momento, por lo que se conoce, el CSD ha declinado, manifestando que la designación de auditores para la precitada revisión es potestativa y no obligatoria.. Sin duda, un panorama complejo que significa las debilidades de las cuentas del Fútbol Club Barcelona y de las propias resoluciones de los órganos reguladores, como La Liga, que ve cómo éstas, pese a estar absolutamente fundadas, pierden eficacia en el trámite de impugnación administrativo y judicial, pero, sin duda, para ambos, queda partido y en las próximas semanas habrá novedades. De momento, el Barça ve limitada todavía más su capacidad para fichar, pero, como la piel del camaleón, sus cuentas pueden cambiar; veremos qué sucede.. Felipe García Hernández es abogado y socio director de Círculo Legal. Miembro de la Junta Directiva Internacional World Compliance Association.
Llama la atención que en el transcurso de estos últimos tres meses el FC Barcelona ha tenido tres auditores
El comunicado emitido ayer por La Liga no es más que la confirmación de lo que muchos sospechaban; es un desenlace que muchos anunciaron ya de unas cuentas, en las que hay muchos puntos grises, algunos muy oscuros y de difícil defensa, y que colisionan frontalmente con la normativa contable y de auditoría.. El FC Barcelona consiguió, a través de una medida cautelar, que el CSD paralizara la no inscripción de los jugadores Dani Olmo y Pau Víctor, pero no es el CSD el que tiene que resolver esta cuestión, sino el Tribunal Administrativo del Deporte, TAD, que es quien tendrá que resolver si efectivamente la inscripción de estos jugadores se debió acometer o no.. Por todos es conocido que estos jugadores fueron inscritos a consecuencia de una operación o un negocio jurídico planteado por el Fútbol Club Barcelona, como era la venta de los palcos VIP, valorados en torno a 100 millones de euros. Esta operación, según el comunicado de la Liga, no se hizo ni en tiempo ni en forma, por lo que no se pueden computar esos ingresos, y por lo tanto, de facto se interpretaría como una reducción del límite salarial del Fútbol Club Barcelona, lo que confirmaría la resolución emitida en su momento por La Liga de no inscripción de estos dos jugadores. Una resolución que la Federación Española de Fútbol también compartía. Llama la atención que en el transcurso de estos últimos tres meses el FC Barcelona ha tenido tres auditores. Sin duda, parece que estas cuentas pueden representar un peligro para aquellos asesores o auditores que estén encaminados a certificar sin salvedades la imagen fiel que el club propone.. La Liga, en los controles presupuestarios que tiene establecidos y donde viene solicitando información de los estados contables financieros intermedios, ha confirmado sus sospechas sobre la operación de la venta de palcos VIP.. De hecho, La Liga ha anunciado que formalizará una denuncia a través del ICAC contra el auditor que certificó la contabilización de la venta de estos palcos VIP en la cuenta de pérdidas y ganancias, cuando precisamente en esta revisión que se está haciendo, parece no haber rastro de ella. La Liga ha resaltado que esa contabilización no se ha efectuado conforme a lo que indicó el club y a lo que certificó este auditor, un hecho que reduce el margen de maniobra en la capacidad de fichar del club culé.. Este hecho (no casual) viene casi a coincidir con la resolución que en pocos días se estima que va a emitir el CSD a consecuencia de la cautelar que planteó el Barça, y que está permitiendo que ambos jugadores jueguen competiciones oficiales.. Estas medidas adoptadas por La Liga hacen todavía más complicado el escenario, y sin duda, pase lo que pase ante el CSD y posteriormente ante el TAD, parece que finalmente pueden ser los tribunales ordinarios los encargados de resolver esta complicada situación.. Lo que no puede negar la Liga es que sus resoluciones pierden toda eficacia cuando los clubs agotan los recursos en fase administrativa, y ya no digamos cuando ejercen acciones judiciales, dejando a estas como papel mojado.. Finalmente, el Barcelona es posible que consiga sus objetivos por lo menos a corto plazo; de hecho, sus jugadores siguen jugando.. Un escenario sin duda complejo, y donde La Liga parapeta toda la información recabada en la revisión de los estados contables intermedios al CSD, precisamente para que falle a su favor, incluso solicitándole en varias ocasiones que se nombrara y designara a un perito para que revisara en concreto esta operación de la venta de los palcos VIP, algo que de momento, por lo que se conoce, el CSD ha declinado, manifestando que la designación de auditores para la precitada revisión es potestativa y no obligatoria.. Sin duda, un panorama complejo que significa las debilidades de las cuentas del Fútbol Club Barcelona y de las propias resoluciones de los órganos reguladores, como La Liga, que ve cómo éstas, pese a estar absolutamente fundadas, pierden eficacia en el trámite de impugnación administrativo y judicial, pero, sin duda, para ambos, queda partido y en las próximas semanas habrá novedades. De momento, el Barça ve limitada todavía más su capacidad para fichar, pero, como la piel del camaleón, sus cuentas pueden cambiar; veremos qué sucede.. Felipe García Hernándezes abogado y socio director de Círculo Legal. Miembro de la Junta Directiva Internacional World Compliance Association.